Pedrosa hará retroceder los primaveras este fin de semana cuando haga una aparición comodín para KTM en el MotoGP de España, su carrera de casa y el decorado de un momento icónico hace 15 primaveras.
El rey Juan Carlos de España jugó un papel de pacificador en Jerez en 2008, obligando a los acalorados rivales Pedrosa y Lorenzo a darse la mano, aunque no fue para poner fin a la animosidad de inmediato.
“Fue un punto importante, posteriormente de lo que pasó, todo el mundo hablaba de eso”, dijo Pedrosa a Revelo mientras se prepara para retornar a pasar en MotoGP.
“Él y yo seguíamos con esa tensión personal, no era natural para nosotros dialogar, compartir opiniones o gustarnos.
“Cada uno tenía un carácter opuesto al otro, eso fue lo que hizo más cachas el choque.
“Con el tiempo ese momento ayudó, creció el respeto mutuo y cambió el tipo de relación”.
La enemistad de Pedrosa y Lorenzo comenzó en categorías inferiores pero continuó en MotoGP.
Picó en Alemania en 2005 cuando un choque dejó a Lorenzo en la piedrecitas.
En sus últimos primaveras empezó a acaecer rayos de luz y, hoy en día, son compañeros como comentaristas y expertos de MotoGP en España.
Pedrosa cambiará el micrófono por los cueros en Jerez este fin de semana, quedando Lorenzo en su papel de comentarista.
“[Looking back]Tengo buenos memorias”, dijo Pedrosa sobre su rivalidad en la pista.
“En el momento, memorias tensos e incómodos.
“Estábamos peleados, había roces, declaraciones, tensión en la pista, si le pegabas o le pegabas, para los dos perder era muy malo.
“No son buenos memorias, pero en el pasado son buenos porque nos empujábamos de tal guisa que eso hizo que subiéramos de nivel a un punto en el que nos quedamos solo él y yo, los demás íbamos un claro paso detrás. .”
Se le preguntó a Pedrosa si, ahora con 37 primaveras y en retrospectiva, seguiría actuando de la misma guisa con Lorenzo.
“Cometí errores, errores, que me hubiera gustado no cometer”, dijo.
“Son parte del enseñanza, de conocerte mejor y las cosas todavía van cambiando, vas aprendiendo sobre la marcha.
«Obviamente, si pudiera, habría hecho cosas diferentes, pero la mayoría de ellas no las haría».